Manantiales matutinos

Jueves, 24 de mayo de 2007

¡Buenos días!

Se nos ha abierto esta mañana, con timidez, algún que otro claro entre las espesas nubes de estos días por el que mana algún que otro vivificante rayito de sol. De todas formas los meteorólogos auguran más días de copiosos chaparrones primaverales, con sus rayos, truenos, abundante lluvia en poco tiempo, sus consiguientes inundaciones y todo lo demás, que aunque aquí, a la vera del Arlanzón, no hemos llegado a tanto, parece ser que por otros lares andan ahogándose por los charcos surgidos de torrenciales manantiales nubosos. Aquí yo sigo, protegido en mi esfera laboral, tras los ventanales de mi despacho, y tratando de beberme lo que las fuentes de la buena vida y el buen saber ribereños me deparen.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "La fuente de la vida" ("The fountain"), de Darren Aronofsky, y con Hugh Jackman y Rachel Weisz. Desconcertante película que nos habla básicamente sobre el mito de la fuente de la eterna juventud o del árbol de la vida, demasiado pretenciosa y con una rimbombante fantasía, basada en mitos mayas, budistas y hasta bíblicos. Película confusa que narra tres universos paralelos: el momento actual, la novela que está escribiendo la moribunda protagonista, y una especie de ensoñaciones futuristas del protagonista, investigador sobre el cáncer. Todo en una historia muy enrevesada y con momentos casi patéticos (por lo malos) ... por algunos instantes me pareció una "paja mental" del Aronofsky éste, de quien no había visto sus dos anteriores películas, "Pi" y "Réquiem por un sueño".

Sin embargo es una película de gran vistosidad, con pocos diálogos, de muy bellas imágenes, con una estupendísima banda sonora, y con algunas escenas sueltas (el conjunto es fallido) realmente sublimes; muy especialmente la genial escena que nos cuenta el final de la novela, que no es el final de la película, aunque casi. Como ya he dicho, la historia nos habla (y lo resume estupendamente la escena del final de la novela contada en el film) de la inmortalidad, de qué es realmente ésta, y de ciclos de vida, muerte y renacimiento subsiguiente, tanto cósmicos, como biológicos y vitales, que todo está relacionado, que no somos más que polvo de estrellas. En definitiva, que nos está hablando de inmortalidad hinduista, de la que se destila de los últimos conocimientos científicos ... y de refilón, de amor inmortal.

Bueno, pues ahora toca beber del manantial del saber, y ahí van unos chorritos de sabiduría ajena:

 - "La paciencia es un árbol de raíces amargas pero que da frutos muy dulces".  (Proverbio persa).

 - "Lo que ahoga a alguien no es caerse al río, sino mantenerse sumergido en él".  (Paulo Coelho).

 - "Si la muerte fuera un bien, los dioses no serían inmortales".  (Safo).

 - "La vida no debe ser una novela que se nos impone, sino una novela que inventamos".  (Novalis).

 - "La vida es como una leyenda: no que sea larga, sino que sea bien narrada, es lo que importa".  (Séneca).

 - "La vida es un manantial de goces; pero donde la canalla deja envenenadas las fuentes".  (Friedrich Nietzsche).

 - "Vivir es desatinar:

tener para destejer:

aprender para olvidar;

amar para recordar

amor que no puede ser

o la alegría de ayer

que nunca vuelve a pasar".  (Antonio Machado).

 - "Si vivir sólo es soñar

hagamos el bien soñando.

Sueña que vives amando,

que es tu solo fin amar

y sueña que, sin cesar,

vas los bienes derramando".  (Amado Nervo).

 - "El que vence a los otros, es fuerte. El que se vence a sí mismo es poderoso. Pero aquel que sabe que no perecerá al morir, aquel es eterno".  (Lao-Tsé).

 - "No existe un principio, no existe un final; solamente existe una infinita pasión por la vida".  (Federico Fellini).

Besos y abrazos,

Don.
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